Missing
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En un último y desesperado esfuerzo por salvar a su hijo, Becca se enfrenta a sus propios demonios como nunca había hecho antes. Mientras, Suspect Zero intenta completar la venta.
Giancarlo presta su ayuda a Becca para localizar a Azimoff. Por otra parte, la agente Violet y Dax, jefe de la sección de Europa del este de la C.I.A., tratan de atrapar a la exagente. Mientras, Becca descubre nuevos datos sobre el paradero de su auténtico enemigo.
A pesar de la tensión emocional que sufren, Becca y los dos hombres de su vida unen sus fuerzas para huir de Europa, ya que la C.I.A. y las fuerzas policiales están muy cerca de dar con su paradero.
Julio 2013
El agente Dax tiene la clave para encontrar la verdadera bomba a partir de un código clave.
Tras ser detenido en Bulgaria, Paul llega a una cárcel de alta seguridad y es atacado por presos que intentan acabar con su vida.
Violeta conoce el paradero de Martin y del hijo de Becca, pero no está dispuesta a colaborar. La CIA le deja la iniciativa a la madre de Michael, que amenaza con romper los dedos, los dientes y las rodillas y después usar una batería de coche para provocar descargas eléctricas.
Tras una peligrosa persecución por las calles de Estambul, Becca recuperar a su hijo, pero el amor de una madre no perdona y está dispuesta a ir hasta el final para acabar con el hombre que amenazó a su familia.
Las formas en que Martin y Rossi fueros abatidos despierta las dudas de Dax Miller sobre su agente. Además, una mujer de la Interpol le da un mensaje que no le cuadra.
Dax Miller se pone del lado de Becca y su primera misión es conseguir que el padre de Michael deje la cárcel, pero eso no es fácil.
“Espionaje básico: si no descubres dónde está la filtración, fíjate en quién duerme a tu lado”, sentencia Dax Miller.
Martin quiere evitar que Oksana le cuente la verdad a Michael y para ello utiliza sus medios: “Quiero a Michael y si se lleva a una puta como una casa, querré a esa puta como una hija… No tienes nada de especial. Michael es impetuoso e iría a por mí si le dijeras la verdad, así acabaría muerto y tú, también”.
“Sólo necesitamos estar juntos para ser fuertes”, le dice Michael a Oksana cuando ella le pide que huya solo.
Durante un trayecto en coche, Paul cuenta que dejó a su familia para protegerles: “Durante años observé a mi familia a distancia… Estos diez años han sido una condena que no le deseo a nadie”.
La agente de la CIA tiene órdenes de capturar a Becca y Rossi, que sigue enamorado de ella, pretender ayudarla a escapar, pero las cosas no salen como tenía previsto y Rossi termina malherido.
Michael sigue secuestrado y el tiempo apremia. Becca y los dos hombres de su vida deberán trabajar juntos, mientras las autoridades de Roma y la CIA les siguen los talones. Por otro lado, Max descubrirá quién es el verdadero enemigo.
Las pistas conducen a Becca hasta Estambul. Allí, la exagente de la CIA deberá sacar a la luz un lado oscuro si quiere tener una mínima oportunidad de salvar a su hijo Michael. Mientras, el principal sospechoso trata de completar su objetivo final.
Una llamada de teléfono hace que Becca y Paul descubran que Martin Newman es el traidor. Pero no sólo reciben esta impactante noticia, ya que su hijo ha vuelto a ser secuestrado por él.
Paul confiesa que trabajaba para una misión secreta que le obligó a desaparecer de las vidas de Becca y de su hijo.
Becca se ve obligada a recordar detalles de un antiguo caso que fue traumático para ella.
Paul Winstone le asegura a Becca que va a dar su vida a cambio de la de su hijo.