La Humanidad. La historia de todos nosotros

¿No quieres perderte nada de La Humanidad. La historia de todos nosotros?

Luego configura una alarma para que podamos mantenerte informado de nuevos episodios por correo electrónico de forma gratuita. ¡Conveniente!

Mayo 2016
Los nuevos deseos y el progreso dan lugar a nuevos conflictos. La revolución nos conduce a los orígenes de una nueva era de la humanidad que enterrará casi por completo el pasado.
Las innovaciones e invenciones transforman el aprovechamiento de recursos en nuevas formas de energía. Esto ha degenerado en las formas más complejas de hacer la guerra. Cuanto más peligroso parece el descubrimiento, más parece avanzar la humanidad.
El ser humano dominal as fronteras del planeta y llega el momento de aprovechar sus conocimientos acerca de la física y la química para vanzar hacia el futuro logrando nuevos recursos, mayor expansión y armas que podrían destruir el planeta.
Los nuevos descubrimientos y las nuevas formas de obtener recursos de la naturaleza. Esto ha provocado que se desaten multitud de guerras entre diferentes civilizaciones.
Nuevas formas de pensar, nuevas formas de organizarse... el ser humano debe encajar todas las piezas del rompecabezas que es la existencia. Para ello se sirvió de la religión.
Un imperio que cae hace que otro nuevo vuelva a surgir. Cuando las viejas creencias deben dejar paso a las nuevas lo hacen, generalmente, a raíz de la violencia, de combates y guerras.
El ser humano es capaz de luchar en las más cruentas guerras, explorar el mundo, realizar grandes construcciones y crear los más fantásticos inventos. Pero hay enfermedades que amenazan a la humanidad y la llevan al borde de la extinción.
El ser humano es superviviente por naturaleza. Ha logrado sobrevivir a las enfermedades y a las guerras. Ahora toca resurgir y buscar más allá del mundo conocido. Para ello, se valdrá de nuevos inventos.
Las guerras son el modo de conquista de nuevas tierras. La expansión de los imperios da nuevas posibilidades de comercio y de riqueza. El poder determina qué hombres son más válidos. Los largos viajes transatlánticos abren las puertas a los nuevos mundos.
Todos los hombres tienene algo en común: desea la riqueza. Cuanta más tienen, más tesoros desean descubrir y poseer. El descubrimiento del Nuevo Mundo no solo ha abierto la puerta a nuevas tierras, sino también a nuevos conflictos.
El ser humano coloniza, descubre y explora... pero la naturaleza guarda demasiados misterios como para que quede fuera de las indagaciones de los científicos. Es la hora de que los hombres abran sus miras para descubrir realmente el mundo en el que viven.
Diciembre 2014
Los nuevos deseos y el progreso dan lugar a nuevos conflictos. La revolución nos conduce a los orígenes de una nueva era de la humanidad que enterrará casi por completo el pasado.
Las innovaciones e invenciones transforman el aprovechamiento de recursos en nuevas formas de energía. Esto ha degenerado en las formas más complejas de hacer la guerra. Cuanto más peligroso parece el descubrimiento, más parece avanzar la humanidad.
El ser humano dominal as fronteras del planeta y llega el momento de aprovechar sus conocimientos acerca de la física y la química para vanzar hacia el futuro logrando nuevos recursos, mayor expansión y armas que podrían destruir el planeta.
Nuevas formas de pensar, nuevas formas de organizarse... el ser humano debe encajar todas las piezas del rompecabezas que es la existencia. Para ello se sirvió de la religión.
Un imperio que cae hace que otro nuevo vuelva a surgir. Cuando las viejas creencias deben dejar paso a las nuevas lo hacen, generalmente, a raíz de la violencia, de combates y guerras.
El ser humano es capaz de luchar en las más cruentas guerras, explorar el mundo, realizar grandes construcciones y crear los más fantásticos inventos. Pero hay enfermedades que amenazan a la humanidad y la llevan al borde de la extinción.
El ser humano es superviviente por naturaleza. Ha logrado sobrevivir a las enfermedades y a las guerras. Ahora toca resurgir y buscar más allá del mundo conocido. Para ello, se valdrá de nuevos inventos.
Las guerras son el modo de conquista de nuevas tierras. La expansión de los imperios da nuevas posibilidades de comercio y de riqueza. El poder determina qué hombres son más válidos. Los largos viajes transatlánticos abren las puertas a los nuevos mundos.
Todos los hombres tienene algo en común: desea la riqueza. Cuanta más tienen, más tesoros desean descubrir y poseer. El descubrimiento del Nuevo Mundo no solo ha abierto la puerta a nuevas tierras, sino también a nuevos conflictos.
Archivo